30 de enero de 2024, 7:24
La escena de los parques de caravanas estadounidenses exhibe un conflicto social grave que también se percibe en barrios marginales europeos. Bolsas de familias que viven al margen del sistema, que malviven a golpe de ayuda pública o directamente subsidiadas por entidades sociales, sin ninguna posibilidad de reintegrarse al conjunto de la sociedad. Son bloques importantes en los que ni siquiera existe el ascensor social. En ocasiones, se arrastra ya desde hace generaciones esa marginalidad que no puede darse por buena.
El dato de que hay 7.000 familias con todos sus miembros en paro en la provincia de León ofrece una imagen actual peligrosa pero también un conflicto creciente a largo plazo. No se puede admitir que hay bolsas de pobreza enquistadas. Atenta contra los derechos humanos, la Democracia y la Constitución. Las sociedades que mantienen en el tiempo personas viviendo a golpe de las llamadas ‘paguinas’ han probado su fracaso en América central y del sur. España debe facilitar alternativas.
El dato de que hay 7.000 familias con todos sus miembros en paro en la provincia de León ofrece una imagen actual peligrosa pero también un conflicto creciente a largo plazo. No se puede admitir que hay bolsas de pobreza enquistadas. Atenta contra los derechos humanos, la Democracia y la Constitución. Las sociedades que mantienen en el tiempo personas viviendo a golpe de las llamadas ‘paguinas’ han probado su fracaso en América central y del sur. España debe facilitar alternativas.
